Un nuevo peldaño he logrado,
difícilmente puedo explicar mi entusiasmo,
como he sabido sobrellevar la crisis, la angustia,
el sentirse abatido en momentos de tanta incertidumbre,
en momentos de mucha tristeza, en momentos en busca de sentido...
Ser prudente y agradecido ha sido mi mejor bastión
el sabor de mi avanzada ha tiendo varios momentos
tu estuviste en los momentos donde
no eran del todo dulces, fueron ácidos en su mayoría
sin embargo soñaba, te influenciaba
y así nos abrimos paso en el camino.
La avanzada también hizo su parte, y se abrió paso entre nosotros
abriendo así nuestros caminos.
Conozco bien el sabor de la tristeza,
avanzar sin mi complemento
ha sido un desafiante reto como emprendedor,
quizá mayor a seguir afrontando la vida
con el mismo entusiasmo, disciplina, pasión y vocación.
He soñado, he organizado, y he eliminado bastantes cosas en mi vida,
también he ganado el partido de la puntualidad -claro que si-;
con mucho trabajo, esfuerzo y dedicación
he deleitado el sabor del éxito, pero... hoy me he dado cuenta
que el sabor de la avanzada sabe mucho mejor si
es compartido -si lo deleitamos juntos-.
No seria responsable afirmar que debo eliminarte de mi vida,
tampoco es responsable decirte que no lo he echo,
la lucha sigue su marcha, lucha que hoy esta compartida,
el sabor de la tristeza, del éxito, son una constante,
pero tu no lo eres mas allá de eso que niegas sentir
(a eso que yo afirmo tener).
Indudablemente quisiera eliminar el anterior párrafo
pero no me niego la posibilidad de desviar levemente
el sentido de este texto, para salvaguardar el sabor
del recuerdo, la esperanza y la verdadera felicidad.
Se abren con buen ritmo, preciosas oportunidades,
me ha tomado por sorpresa dimensionar lo que ocurre en mi vida,
simplemente son oportunidades que intento aprovechar
con agigantados sacrificios, trabajos extendidos y luchas significativas;
hoy el sabor de esta avanzada les compete,
pero a ti te compete hasta nuestro final.
Continuemos la avanzada.
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